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miércoles, 31 de enero de 2018

MANUAL DEL BUEN DESPEDIDO (CITA CON MONTORO)

Ante todo quiero dejar claro que la entrada de la semana no pretende ser un manual de praxis de ningún tipo! Sólo me faltaba ser un experto en el tema! Mi intención es narrar mi experiencia personal y como el hacer (o intentar hacer) las cosas bien puede desembocar exactamente en el mismo resultado que si las llevas a cabo de manera descerebrada! Vamos allá!

Ya lo he explicado en multitud de post! Parece que sea mi motivación! Hace casi 2 años me despidieron del trabajo que estaba llevando a cabo como Jefe de Almacén. La empresa decidió externalizar el servicio y dejar de tener su propia instalación almacenera. Otra semana contaré el día de autos ya que, visto desde la distancia, es incluso cómico!



Bien, en el momento de la defenestración laboral la empresa reconoció al momento lo improcedente del tema. Era algo de suma importancia pues de ello dependen cosas como la cuantía de la indemnización a percibir. Me extendieron una serie de documentos que me fueron explicados con la máxima delicadeza, todo hay que reconocerlo (pues me consta de muchos que en esa situación sufren eso de "encima de burro, apaleado", me detallaron los pormenores del asunto y yo, que jugaba a ser profeta desde hacía tiempo con ese tema, además de estar pasando un muy mal momento anímico por culpa de la presión a la que cierta "persona" que ejercía como mi superior directo, acepté la situación y pensé que era la oportunidad para poder emprender un cambio en mi vida profesional.

Al ingresar el montante de la indemnización en el Banco, la persona que nos lleva la cuenta me dijo que, al contrario de lo que yo pensaba, las indemnizaciones no tributaban a hacienda! Dicho claro: no tendría que pagar parte de ella a las arcas públicas! Yo sentí gran alivio pero dando crédito al operador de banca en su profesión pero no como letrado en temas fiscales, consulté todas la información que pude sobre el tema. Todo lo que encontré corroboraba lo que me dijo! Bueno! Dentro de lo dantesco de la situación, con mi mujer que hacía pocos días había empezado en un nuevo puesto de trabajo, la píldora quedaba ligeramente endulzada. Cabe la pena destacar, por si algún día os veis en esa situación, que las indemnizaciones que si que tributan son las que sobrepasen los 180.000 euros. Mmmm... pensad bien lo que se debe tener de nómina para cobrar eso! Eso si es pasta y no la italiana! Además, sólo pagas a hacienda por el montante que sobrepase esos 180.000! Dicho así, y con mi aguinaldo tras patada anal en el banco distando eones de esa cantidad, me quedé tranquilo... aunque... de todas maneras, decidí no tocarlo en un tiempecito prudencial (que dura hasta el día de hoy).

Pasó algo más de un año y llegó la hora de celebrar una de las mayores fiestas de todo "ciudadano de bien"... y no hablo de la Fiesta de la Democracia!!! Que ya me tocó ser presidente de mesa electoral en las generales!!! Hablo de la declaración de la renta!!! Siguiendo las intuitivas indicaciones del programa comosellameahora y del no menos facilísimo sistema clavepinpermanentedigital (madre mía... hacer los trámites por ouija sería mucho más sencillo!) obtuve horas después mi borrador y, oh sorpresa, la cantidad que me aparecía como Ingresos se me antojó algo elevada. Vamos, como si no hubiese dejado de trabajar o como... si hubiesen incluido la indemnización! Como yo sabía que no había problema, pues yo había obrado bien en todo momento, pedí cita con los competentes trabajadores de mi oficina local y explicar allí el desacuerdo.

El día de antes de mi cita con los Sheriff de Montoro, preparé toda mi documentación incluyendo, como no, todos los papeles de la empresa en los que se declaraba que había sido despedido improcedentemente y el regalito que me fue entregado sin lazo. Para quedarme más tranquilo volví a consultar sobre la tributación o no del asunto. Volví a darme de bruces con varias páginas que me exoneraban de satisfacer cantidad alguna pero mira tú por donde, decidí mirar una más, y al final del artículo, que estaba apunto de cerrar pues explicaba lo mismo que en el resto, me llamó la atención la imagen de un conejo saliendo de una chistera. Bajé el scroll un poco más y vi que un pequeño titular decía algo así como "y aquí está el truco". Lo que pensaba sobre la magia era cierto! Una vez ves el truco, no tiene gracia, y lo que yo leí no tenía ni PUTA GRACIA!

El truco en si era que, efectivamente, las indemnizaciones por despido improcedente no tributan, pero no vale con que la empresa lo reconozca, no. El procedimiento correcto es ir a juicio o a un acta de conciliación para que sea un juez o un conciliador (o como mierda quiera que se llame el del acta), que ellos digan que efectivamente, es improcedente, te paguen exactamente lo mismo, pero que te pongan la pegatina de CERTIFICADO POR UN TÍO PREPARAO. Porqué? Si la empresa lo puso ahí! Y ni siquiera a mano! Con ordenador, como los modernos! Y todo en MAYÚSCULAS!!! Pues porque ya se sabe, es que tal vez el trabajador, no contento con ser despedido y tener un tiempo para dar uso de sostén oval a ambas manos, tal vez haya pactado con la empresa para que le despidan! No basta con demostrar que efectivamente has cobrado e ingresado esa indemnización, malandrín!!! Si no has pasado por el de la toga, eres un presunto vago que ha querido vivir de la sopa boba! Me quedé un tanto cuadriculado pero pensé 2 cosas: 1- Eso lo ponía en una página de internet, sólo en una (de las que consulté, claro), y 2- en el peor de los casos, yo tenía mi dinero bien guardado.

Pase pase!!! No hay nada que temer! Estamos aquí para ayudarle!!!

Nervioso perdido por enfrentarme al tener que regalar 2000 machacantes que creía más míos que mi hernia inguinal me tocó el turno en la oficina de hacienda. Como buen despedido quise seguir haciendo las cosas bien. Expliqué a la operaria que parte de mis ingresos eran blablablá, que ahí llevaba los papeles para demostrarlo, y que, por si acaso, había escuchado rumores de lo del tema de la necesidad de un reconocimiento judicial para que esa indemnización estuviese libre de pecado. La operaria, que pasó a ser tipa, me dijo que de eso de un juicio no tenía ni idea y que si la indemnización no era "muy alta", no pagaba. No la vi muy profesional pero me sentí aliviado. Yo pensaba que ahora ella pondría, en una delas 650.594 casillas del borrador, que había una indemnización, o una cosa que no pagaba, o yo que sé! pero que quedaría reflejado en algún lado! Pues no, la tipa, que pasó a ser tía, me dijo: "entonces usted dice que XXXXX euros no los ha cobrado, no?". Nooooo señora! No lo decía yo! Lo decían los documentos que tuve a bien llevar! Además, tampoco decía que no los había cobrado, si no que no debía pagar por ellos. Procedió de la siguiente escalofriante manera: Cogió una calculadora, anotó los ingresos del borrador, le dio al - seguido de mi indemnización (que hubo que indicarle, pues estaba poniendo un número equivocado) y lo metió a palo seco en la declaración! Si! de repente miles de euros se habían esfumado!

Yo cada vez estaba más nervioso! Aquello no me parecía normal! Pedí que confirmase si ese era el procedimiento correcto y si era 100% fiable que no debía declarar mi finiquito! Llamó a una supervisora que sacó un librito que me recordaba a los de catequesis! Si! Esos pequeñitos con letra de novela del oeste Estefanía! Me leyó el punto que hacía alusión a las indemnizaciones y efectivamente, no salía nada de ningún juicio, ni juez, ni verdugo! Ya empezaba a estar tranquilo de verdad cuando, antes de irse dijo: De aquí a un tiempo le llamarán de Hacienda para que explique porqué faltan esos miles de euros en la declaración!!!

Cómo???? Me tenían que llamar??? Efectivamente!!!! Dentro de las 650.594 casillas del formato del borrador, no había ninguna para indicar esa salvedad! El procedimiento normal, según ella, es que tenía que hacerme pasar por un cuñao de turno que quita dinero a la brava en el documento, esperar que me pidiesen explicaciones, y, entonces, tenido ya como culpable, tener que demostrar mi inocencia!!! No es broma! Eso me dijeron (bueno... sin lo del cuñao y esos adornos... ya me entendéis!). Pregunté que qué pasaría si, cuando llegase ese momento, alguien de su club decidía que ese dinero si que tributaba y la respuesta fue "pues tendrá que pagar una multa, pero eso no pasará porque está todo bien". Joder! Querían tanto mi tranquilidad como yo a Rajoy! Me dejó en manos de la tía, ahora tía pedorra que me atendió en primera instancia que, para poner la guinda del pastel añadió "ya le llamarán, porque eso canta como una almeja". Hijaputa!!! Si eres tú quien está haciendo cantar al molusco!!!

Salí de Hacienda y mi mujer me preguntó retóricamente si ya estaba más tranquilo a lo que le contesté exacerbado que no, que estaba 100 veces más nervioso. Tal fue mi estado que nada más llegar a casa busqué el teléfono de la Agencia Tributaria y llamé, no para preguntar mi duda, sino para directamente decir que había presentado una declaración y que quería retroceder el trámite! La mujer que me atendió, tras decirme que me tranquilizase, se interesó por el motivo. Tras explicárselo, me dijo que iba a consultar sobre el asunto, y si efectivamente debía haber juicio de por medio para no tributar, etc... tras un minuto de espera me dijo que podía estar tranquilo. Me leyó el párrafo de la ley correspondiente, y me indicó que efectivamente, me requerirían para justificar esa diferencia de ingresos, pero que no habría ningún problema.

Hace un par de semanas el cartero llamó a mi puerta. Tenía la esperanza de que el certificado que traía fuese uno de esos paquetes que de vez en cuando le envían a mi esposa, pero sabía que no, que era yo el agraciado. Efectivamente. Era la notificación de hacienda conforme habían detectado una diferencia de ingresos y que podía proceder a pagarlos o bien a justificarlos. Tras pedir hora, al día siguiente estaba de nuevo en la oficina correspondiente con todos mis papeles, originales y fotocopias.

Fui requerido enseguida. Me dirigí al mostrador asignado y en cuanto empecé a exponer el caso la chica preguntó al hombre de al lado si él sabía "como iba eso". El hombre parecía que hubiese enviado la carta él mismo pues me dijo "ah si! de una diferencia de XXX euros, no?". Le indiqué que así era, y que correspondían a una indemnización por despido improcedente, a lo que, al segundo y sin dudarlo dijo "ah vale... fuiste a juicio?". Cagonlaputa!!!! Pregunté por activa y por pasiva lo del juicio, todos negaron la necesidad del mismo, y el único que lo sabía estaba ahí, agazapado, esperando 8 meses a que yo me presentase para decirlo??? Le contesté que no, a lo que me preguntó por la documentación que aportaba. La leyó detenidamente con sus binoculares mientras acompañaba las líneas con el dedo. No dijo nada más que me volverían a llamar para entregar la documentación en otro mostrador. Al momento volví a ser requerido y entregué todo. Al acabar, le pregunté a otra chica que era la que me atendía que, sabiendo que ni era ella la que decidía ni que sus palabras eran vinculantes, si ella creía que estaba todo correcto. Me dijo que efectivamente ella no llevaba el tema, pero se giró y preguntó al hombre de hace un rato, que estaba como a 2 metros de distancia. Él tipo dijo "No lo sé. Yo no he mirado nada ni sé de que va". Tal vez habían pasado 3 minutos desde que me atendió él mismo, y ni aquello era Memento, no el tipo se parecía a Guy Pierce y su perdida de memoria en la peli!!! De nuevo, "la mar de tranquilo", abandoné el local con la consigna de que no sufriese, que me avisarían enseguida, y que en caso de haber multa habían deducciones...

Cabe decir que la multa es del 50% de recargo, con lo cual esos 2000 euros se transformarían en 3000. En ese momento entendí lo de la imagen de aquella chistera y el conejo que vi unos meses atrás! Vamos a tratar de hacer un breve resumen:

- Fui despedido con reconocimiento de la empresa de la improcedencia de la acción y recibo la indemnización correspondiente. No planteé nada de ir a juicio porque la cosa no podía llegar a buen puerto, ni quería líos, ni valgo para ellos (aunque los líos siempre me busquen a mi).

- Llega la hora de hacer la declaración y pregunto a 3 personas de la administración sobre la conveniencia o no de declarar esa indemnización al no haber juicio de por medio, a la última casi rogándole el retroceder la presentación del borrador para pagar los 2000 euros. Las 3 personas me dicen que no hay que tributar.

- Una vez soy reclamado para excusar esa diferencia de dinero, el trabajador que me atiende suelta lo "del juicio"... a los 3 minutos niega haberme ni visto.

Pregunta: Podría haber hecho yo algo más? Hice algo mal? Actué con negligencia o con picaresca?

Conclusiones: Soy como un Formula 1. Que digo! Como un cohete espacial! Paso de 0 a 3000 en un segundo! Lo explico!!!! Despido improcedente: 0, no voy a juicio: 2000, y ahora viene la marcha larga: tras preguntar, preguntar y preguntar, no declaro la indemnización, y paso a 3000... 3000 euros que posiblemente deberá pagar. Digo posiblemente porque 2 semanas después aun no he sabido nada del tema, pero a estas alturas de la película y en vistas de como va todo, me caen fijo!

Conclusiones 2: Es posible que acabe pagando lo mismo que alguien que a sabiendas se haya descontado más de 7000 euros en la declaración para ver si cuela (vamos, alguien que haya defraudado de verdad), o bien la misma cantidad que algún afortunado que haya cobrado una indemnización de 187000 euros.

Conclusiones 3: El cuñao de turno, ese que se tira al suelo al ver una baldosa de la calle suelta para denunciar al ayuntamiento, y que hubiese denunciado a la empresa aunque le hubiesen despedido por asesinar a un compañero, hubiese pagado 0 euros. Es curioso... te dicen que sea por lo que sea no te vayas a malas de un trabajo, porque siempre pueden pedir referencias, informes, etc... y a la vez, que les denuncies para que luego no te sableen!

Conclusiones Finales: Por favor, no me habléis del Karma, y que algún día me devolverá eso de ser "tan bueno"... que seguro que el Karma también tributa!!!

4 comentarios:

  1. Joder Hermano, ni el Castillo de Kafka... En este caso tengo de sobra para compartir contigo y por vía doble: por un lado mi señora está inmersa desde hace más de un año en proceloso y desagradable asunto con su 'todavía' empresa del que, si todo sale según esperamos nosotros, acabará despedida improcedentemente, pero ella no va atener tus problemas pues ya ha habido varios juicios de por medio... Un horror la situación, te lo aseguro!!
    Y por otro lado, yo mismo tuve hace un porrón de años un asunto muuuuy largo con Hacienda a cuenta de una multa que se suponía que tenía (y en un principio tuve) que pagar, pero que se resolvió a mi favor con la devolución del importe de la multa más una cantidad extra en concepto de intereses a mi favor; lo cierto es que no sé cómo lo hice, pero les gané jajjaja ¡¡¡SE PUEDE!!!
    Mucho ánimo con estos asuntos y un abrazo!!! Wassail!!!

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    1. Hola Alex!!! Muchas gracias por tus ánimos y por compartir tus experiencias... pensaba que lo de tu mujer ya estaría solucionado... Tener una situación de "malestar", por así llamarlo, en el trabajo en lo mismo que tenerlo en casa... Mucha fuerza con eso! Si recuerdas como lo hiciste para ganar a las hordas de hacienda no dudes en darme la fórmula! jajajaja! Un abrazo!!! Wassail!!!

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  2. Acabo de quedarme muerta. Me parece increíble q tengas que ir a juicio para que hacienda no te cobre. Y luego la incompetencia de los funcionarios que no se enteran de nada y se dedican a marear más de lo que uno está. Espero que al final las cosas se resuelvan a vuestro favor porque esto que cuentas es todo un despropósito.
    Por cierto, como engancha la forma en q que lo cuentas jeje.

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  3. Yo no puedo permitirme quedarme muerto pues no podría pagar el sepelio!!! Hay cosas que no te las crees hasta que te pasan y esta es una de ellas... de todas maneras seguiremos con humor mientras no tribute!!! Muchas gracias por leer y comentar!

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