PUES VAYA UN RESCATE, PRINCESA LEIA...

Ayer por la tarde estaba divagando sobre de qué iba a hablar en el último post del año. Tenía claro que no iba a coger la clásica senda de hacer un resumen del 2016... más que nada es que llevo 2 meses haciendo uno, de todo el año y casi de toda mi vida! Lo que no esperaba es que iba a escribirte a modo de una torpe despedida.

De hecho lo primero que pensé es que hoy, saltándome mi costumbre de postear los miércoles, no lo haría en señal de duelo, pero tenía algunas cosas que decirte, aunque intentaré no enrollarme mucho, que bastante ocupada estarás.

Te voy a confesar que no sé como dirigirme a ti, si como Carrie o como Leia. Supongo que lo justo sería hacerlo por tu nombre real, pero entenderás que un tipo que lleva casi 40 años teniéndote por alguien de la Realeza le va a costar no confundirse.



Cuando muere una celebridad es normal que hayan millones de manifestaciones de duelo (y algunas de alegría, por como es el género humano), y que caigamos en aquello de que "todo el mundo es bueno". Yo no puedo juzgar si como persona eras buena o mala, sólo puedo decir que ayer por la noche, cuando mi mujer me dijo que finalmente habías pasado al plano inmortal, al lado de Yoda, Obi-Wan y Anakin, sentí pena, una pena real, real y dolorosa como cuando supe de las muertes de Jon Nödveit de Dissection y de Jeff Hanneman de Slayer. No sólo sentí la lamentación momentánea de la pérdida de alguien "conocido", sino la más duradera de un ser que ha influido en tu forma de ser, de hacer, y de vivir la vida.

Volviendo muy atrás en el tiempo, de niño tuve 3 amores platónicos. Uno era Sayaka Yumi, la chica que pilotaba a Afrodita-A en Mazinguer Z. Estaba claro que era un amor imposible a no ser que pudiese transformarme en fotograma dibujado. El segundo era Billie Newman (Linda Kelsey en la vida real), la redactora femenina de la serie Lou Grant, y claro, tú, como Leia, eras la tercera en discordia. No temas! Esto no es una declaración de amor! No tengo ni estatura suficiente para ser un Soldado de Asalto! Voy a ser honesto. Billie era la que tenía más números para que, cuando me hiciese mayor, buscase en la guía telefónica norteamericana y marcase el famoso 555. Era intrépida, guapa, una luchadora en un mundo de hombres, y encima era periodista. Digamos que era la novia perfecta, pero tú eras la aventura peligrosa! No eras la clásica heroína de hace mucho tiempo, en una galaxia muy muy lejana, cuyo mayor mérito era ser rescatada constantemente por el galán de turno. Te podías dar el lujo de burlarte de la altura de uno de tus rescatadores en cuanto le vieses, en lugar de lanzarte cual frágil damisela de 1.55 a sus pies.

Una de mis escenas favoritas era cuando, resguardándote de una tormenta de nubes blaster tras ser liberada de tu prisión en la Estrella de la Muerte, les sueltas a Luke y a Han: Pues vaya un rescate!!! jajaja! No puedo evitar seguir soltando una carcajada cada vez que vuelvo a ver esa secuencia! Era esa mezcla de desdén y de pasión, ese tira y afloja, ese juego de la cuerda estirando de un cable de alta tensión con Solo lo que te hacía única. Como Leia, tomabas tus propias decisiones nada "princesiles", como lanzarte de cabeza a un compactador de basura. Le diste también buenas lecciones a más de un machote cuando mostraste a Han, en plena batalla de Hoth, que tenía mucho que aprender de las mujeres, para mayor alegría de Skywalker.

Por desgracia, como Carrie, R2 no pudo parar el triturador y la maquinaria de la humanidad se encargó de arrinconarte como actriz y persona. Recuerdo a gente criticando "lo vieja que se te veía" en el Episodio VII, aunque te reíste de ello con el mismo ímpetu que demostrabas en tus entrevistas, en tu versión terrícola de Leia. Te aseguro, Carrie, que tenías mejor aspecto que algunos excompañeros de instituto incluso más jóvenes que yo y que hablaban de tu "madurez"! Pasaste lo tuyo, buscado o no! Como tú dijiste, tal vez tenías una vida que valía la pena arruinar. En tu faceta de escritora en parte te viste condenada a hablar de Carrie haciendo de Leia, y precisamente en promoción de uno de esos libros te encontrase en un vuelo que aterrizaba en Alderaan.

Espero Carrie, que tu falta suponga más para tu memoria que un cambio de guión para el Episodio VIII, que a ti, Carrie, te condecoren por lo menos con la misma pompa con la que tú, Leia, lo hiciste con Solo y Skywalker...

Si, Carrie, ya te lo he dicho, ayer noche, al enterarme, me dolió de verdad. Igual que Jon y Jeff me influyeron tanto como guitarrista y con la forma de ver la música, tú como Leia junto a sus compinches, me inoculaste unos cuantos midiclorianos que han pasado a Erik y a Helia, y me hacen, aun a día de hoy, mantener mi pasión por La Rebelión y El Imperio más allá de los límites del borde exterior. Mientras al irme a dormir, te veía a ti, Leia, en tu primera aventura, tuve que contenerme para no ser catalogado como de lágrima fácil (que lo soy).

Me quedo con otra de las imágenes favoritas de la saga. La cara de sonrisa complice que pusiste en la ceremonia de reconocimiento a los héroes de la Rebelión, mirando a Han Solo.

Una vez más, como tantas, he hecho algo que no quería hacer. No sé si despedirme con un fácil "Que la Fuerza te acompañe", decir que "la Fuerza estará contigo siempre", soltar un "Hasta Siempre"... ni siquiera sé si dirigirme a Carrie o a Leia, porque como ya te dije, para mí siempre serás parte de la Realeza, y sí... tienes razón... vaya un rescate!