Vistas de página en total

miércoles, 30 de mayo de 2018

CARTA A MI QUERIDA NUEVA LEY DE PROTECCIÓN DE DATOS

Llevaba tiempo pensando en escribirte... pero sabes? Recibí tantos correos tuyos, desde tantas y tantas direcciones distintas que no sabía a cual contestar. Es por ello, amor mío, que he decidido utilizar mi modesto Blog como un Kevin Costner cualquier metiendo un mensaje en una botella. Así pues lanzo a los 4 vientos virtuales mi mensaje de cariño y agradecimiento.


Las malas lenguas me han estado diciendo que no, que no me quieres, que no te preocupas por mí, pero yo sé que no es cierto y que la envidia ciega que trae el amor no correspondido les ha nublado la vista. Me dicen que la protección extrema que ahora me brindas no es tal y que ya hacía 2 años que debías haberla puesta en vigor. Mi familia me telefonea a todas horas y me dice que soy tonto, que no me doy cuenta, y que si el que me hayas enviado tus manuscritos entre la última semana y el último día del cumplimiento legal no me hace abrir los ojos. Malditos sean! Yo sé la verdad! Me quieres tanto, te preocupas tanto por mí y por la conservación y custodia de los secretos que sólo comparto contigo que estuviste sin dormir hasta el último momento repasando clausula a clausula, personalizándola para mi, desviviéndote por preservar nuestra historia de amor.



No creas que no me asaltaron dudas. Leí y releí tus correos y visité 100 sitios web para saber de tus pretensiones. Lo reconozco: Me costó saber si mi amor consentido era tácito, explícito... pero me pareció tan bonito el que me pidieses que te dijese un TE QUIERO directo, sin rodeos... De paso tuve que visitar varios diccionarios on-line para descartar que lo de tácito no tuviese nada que ver con los sorbos que daba a las tazas de café para mantenerme despierto leyendo y releyendo tus mensajes...

Sé también de que algunos nos acusan de guardar datos secretos de algunas personas que han compartido algún plano de la película de amor que es nuestra historia. Me dicen que tienes, en algún lugar, un lugar, tal vez una pequeña caja de música en la cual custodias esas confidencias, pero que soy yo el responsable de lo que hagas con ellas. No me importa, yo te amo!

Hace unos días incluso me gastaste una de esas bromas que tú sólo haces, de las que me hacen reír tanto: Haciéndote pasar por mi Blog me advertías de que tú, en efecto, tenías guardados esos secretitos de los visitantes a mi espacio, que yo no tendría acceso alguno pero ah! que de haber algún problema tú no querías saber nada... Como te gusta sacarme de quicio... aiiii pillina... como sabes lo cariñoso que me pongo con las reconciliaciones tras nuestras pequeñas rencillas...

Lo repito. Yo sé la verdad, y ahora, ahora si, estoy totalmente seguro de que mi amor es correspondido. Jamás me sentí tan seguro como desde aquel 25 de mayo de 2018 en el que, con consentimientos explícitos y no tácitos, sellaste nuestro compromiso hasta el fin de los días.

1 comentario:

  1. Jajajjaja!!! Bueno, me río por no llorar, porque, ¿qué habrá en las redes acerca de nuestras humildes personas que arteras máquinas cuasipensantes estén metiendo en logaritmos destinados a no se sabe qué en un futuro?
    Lo último que me ha pasado a mí al respecto tiene perendengues: me están llegando correos de alguien que tiene mi misma dirección de gmail, pero sin punto entre nombre y apellido y, ahora resulta que la persona que dio de alta esa dirección es la dueña de todas las variantes de la combinación de mi nombre y apellido y puntos donde quieras ponerlos... Un locura!!! Llevo casi 20 años con esa dirección y ahora resulta que NO es mía??!! Estoy intentando contactar (¡ja!) con Google a ver si me entero de algo más, pero me tienen cabreado como un mono.
    En fin Hermano, cosas de Internet... Wassail!!!

    PD: Muy buena tu entrada política!!

    ResponderEliminar

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.